Ferrarini & Benelli, medio siglo de tradición en el tratamiento de superficies

Ferrarini & Benelli, fabricante italiano de soluciones para tratamiento corona y plasma, está celebrando su quincuagésimo aniversario en 2015. Durante su medio siglo de existencia, la compañía -ubicada en Romanengo, en la provincia de Cremona- ha logrado consolidar su marca mediante la continua evolución de sus soluciones, el abastecimiento de sistemas de vanguardia a la industria del empaque y materias primas plásticas, y trabajando de la mano con los principales fabricantes de líneas de extrusión y equipos de conversión para empaques flexibles.

Para rememorar la historia de la empresa, y como parte de la celebración de su aniversario, Diego Benelli, fundador de la compañía brindó una entrevista en la que reveló detalles de los orígenes de la compañía y los objetivos principales de ésta a futuro.

Cincuenta años atrás en la historia de Ferrarini & Benelli
Diego Benelli inició su carrera en la industria a principios de los años 60 como socio de una fábrica de películas y bolsas plásticas. "En aquel entonces, los extrusores empezaban a utilizar los primeros tratamientos rudimentarios de superficies a baja frecuencia. Para activar las superficies, los generadores con transformadores descargaban en forma de lluvia -mediante un electrodo- 'pequeños rayos'. A pesar de la baja velocidad de estos sistemas, era habitual que el material se perforase y que se produjeran cortocircuitos. Los cortocircuitos, que eran constantes, terminaban quemando el transformador y comprometían el funcionamiento de la línea", aseguró el directivo.

De esta manera, para afrontar el doble desafío que suponía aumentar la frecuencia (para optimizar el tratamiento) y mejorar los componentes, Benelli le solicitó ayuda a Ezio Ferrarini, un técnico que contaba con una sólida experiencia en este campo. Así, ambos diseñaron un sistema más potente y fiable que usaba tríodos (que oscilaban a 1 500 Hz), y luego de dos años de pruebas de mercado positivas, decidieron fundar -en 1965- Ferrarini & Benelli.

Desde entonces, Ferrarini & Benelli ha tenido que atravesar tres importantes fases evolutivas: el paso de los componentes electrotécnicos a los electrónicos (SCR y su correspondiente control); la llegada de la era digital y del software, que revolucionaron los generadores y multiplicaron las posibilidades operativas del tratamiento corona; y más recientemente, el tratamiento plasma.

Para Diego Benelli, uno de los factores más importantes que ha determinado el éxito de la empresa ha sido el entendimiento de la importancia de abrirse mercado a nivel internacional. Seguido a lo anterior, el fundador reconoce que el establecimiento de relaciones de confianza con sus clientes y la continua innovación tecnológica, son otros elementos indispensables que han marcado su vigencia y posicionamiento en el mercado.

El futuro de Ferrarini & Benelli: cincuenta años más de profesionalidad y honestidad
Actualmente la compañía se encuentra trabajando en el desarrollo de una aplicación específica para la industria papelera. Se trata de equipar las líneas de recubrimiento por extrusión de elevado rendimiento y velocidad (hasta 500 m/min), que requieren de una altísima fiabilidad para poder producir 24 horas al día, los 7 días de la semana.

De otro lado, en palabras de Diego Benelli, se está elaborando un sistema de tratamiento corona que garantice un alto rendimiento (gracias a unos electrodos especiales específicamente diseñados), reduciendo al mínimo el riesgo de parada gracias al control y la gestión inteligente de la potencia de los generadores. "El desarrollo de sistemas digitales que se encargen de nuestros generadores nos permite obtener unos resultados óptimos", manifestó.

A un nivel más general, el descubrimiento de nuevos materiales multicapa, la llegada de la nanotecnología y la necesidad de reducir al mínimo los costes representan algunos desafíos para la empresa. "Creo que en un futuro, la flexibilidad y el dinamismo, así como la constante innovación en tecnología, serán requisitos necesarios para trabajar con éxito en este sector", señaló Diego, quien añadió: "Teniendo en cuenta la magnífica posición de mercado que ha conseguido alcanzar Ferrarini & Benelli con los años en todo el mundo, podría pensarse que ya hemos alcanzado nuestros objetivos. Pero cualquier problemática nueva del sector, o la necesidad de un cliente, me impulsan a buscar una solución, a estudiar un nuevo producto o a mejorar los ya existentes. Estos son los objetivos que intento alcanzar todos los días".

Durante los 50 años de la empresa, su fundador ha intentado transmitir una filosofía a toda la empresa: trabajar con profesionalidad y honestidad, proponer productos de alta tecnología y calidad, dar un servicio continuo a los clientes y contemplar los desafíos del mercado como oportunidades para mejorar y garantizar el desarrollo futuro.