De análogo a digital: ¿cómo está cambiando el juego en la impresión de corrugados?

Mientras que la impresión análoga en cartón corrugado ha dominado durante años, la impresión digital está emergiendo como una fuerza disruptiva, ofreciendo flexibilidad, calidad y personalización sin precedente.

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La impresión análoga en cartón corrugado ha sido por mucho tiempo, incluso hasta la actualidad, relevante y preferida para grandes volúmenes y trabajos que no requieren cambios frecuentes en el diseño. Sin embargo, la impresión digital está ganando terreno cada vez más en la industria del packaging debido a su flexibilidad, calidad y capacidad de personalización.

Incluso, la demanda actual de envases y empaques personalizados o hechos bajo requerimientos específicos ha propiciado la adopción de técnicas digitales de impresión. Estos métodos modernos, en muchas ocasiones, se utilizan en conjunto con sistemas de impresión más tradicionales, como la flexografía, el rotograbado, la serigrafía y el offset.

A pesar de esta popularidad, en la industria varias empresas han sido escépticas de adoptar la llegada de la tecnología que ofrece la impresión digital en corrugado. Para Josep Marín Felipe, gerente de producto y marketing en EFI, proveedor internacional de productos, tecnología y servicios, es un escenario que trae consigo diferentes beneficios manteniendo los procesos análogos, pero con la ventaja de la optimización.

“La impresión digital en el packaging viene a ayudar, no viene a sustituir a nadie, por lo menos desde la filosofía de EFI, no se va a sustituir ningún proceso analógico, pensamos que todos tienen cabida en este macromercado del packaging”, afirmó el experto.  

La impresión digital pisa fuerte en Latinoamérica

Y no es para menos, ya que el auge de la impresión digital en corrugado ha tenido un crecimiento exponencial. Con una tasa de crecimiento anual compuesta del 6,45% prevista hasta el 2026, este segmento está redefiniendo la industria del packaging, según el más reciente informe de la firma de investigación, Mordor Intelligence.

A pesar de los desafíos en la transición de métodos tradicionales a digitales, la personalización está impulsando la adopción de la impresión digital. Grandes marcas, como Coca-Cola, ya han aprovechado esta tendencia, ofreciendo etiquetas personalizadas a sus consumidores.

América Latina no se queda atrás en esta revolución. Con un mercado valorado en 2,84 mil millones de dólares en 2022, se espera un crecimiento constante en los próximos años, de acuerdo a cifras de la compañía de investigación, EMR. Brasil, en particular, está liderando el camino, con una participación significativa en las exportaciones mundiales de máquinas de impresión.

Las innovaciones, como la nanotecnología y la impresión 3D, están redefiniendo el mercado de máquinas de impresión en la región. Estas tecnologías no solo ofrecen calidad y velocidad, sino que también abren nuevas oportunidades en sectores como la educación, la alimentación y el comercio.

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Ventajas de la impresión digital: ¿más sostenibilidad y optimización?

Según Marín, con la llegada de la impresión digital en corrugado, la industria del packaging ha visto mejoras en la eficiencia de la producción, con un enfoque en la fabricación justo a tiempo y una gestión eficaz de la cadena de suministro. Además, la tecnología de impresión digital avanzada utiliza solventes más suaves y productos químicos menos dañinos en comparación con las técnicas tradicionales, lo que la hace más ecológica.

Sin embargo, para llegar a la optimización y la sostenibilidad que promete la impresión digital, es indispensable conocer algunos factores clave que inciden en el éxito de la puesta en marcha de este tipo de tecnologías en las compañías.

Cabezales de impresión, claves para el ahorro y calidad

Uno de los primeros pasos en el camino de la impresión digital es la elección no solo el mejor proceso de impresión, que para el caso de los corrugados el ideal es “Ink Jet” (inyección de tinta), sino también los tipos de inyección de tinta o de cabezales.

Actualmente, existen tres tecnologías: Inyección continúa, una de las más básicas, cuya descarga de tinta es alta y se utiliza en su mayoría para imprimir elementos como textos o códigos de barras; Thermal DoD, una tecnología basada en cabezales económicos de plástico y en tinta a base de agua, que permite la impresión de alta definición con una calidad suficiente para poder imprimir alta calidad en packaging; y Drop of demand (inyección de tinta por demanda controlada), cuyo cabezal es de cerámica y es capaz de disparar gotas bajo demanda, por lo cual logra grabados de tono perfectos.

Para alcanzar mayor calidad de impresión en corrugados, el tipo recomendado es Drop of Demand (DoD), pues “a pesar de que su precio es más elevado por sus piezas de cerámica, al ser una tecnología sofisticada, permite obtener la más alta calidad de impresión”, comentó Marín; mientras que la tecnología Thermal DoD es más sensible a materiales como el cartón y a entornos expuestos al polvo, por lo que tiene poca vida útil.

Tipos de tintas: la sostenibilidad en juego

Otro aspecto fundamental es el tipo de tinta que se va a utilizar. En el mercado hay tintas como base agua, UV, UV LED y agua UV. Su elección debe ser directamente proporcional con el material que se va a imprimir. Pero, ¿cómo elegir la adecuada y acorde a las exigencias de los consumidores por productos más sostenibles?

• Base agua: dentro de este mercado de la impresión digital, existen máquinas llamadas SinglePass, las cuales tienen grandes formatos y velocidades de producción. Dentro de este grupo de impresoras, se usan tintas como las base agua, con las que se usan cabezales termales y se secan con luz infrarroja, es decir, se aplica calor a la superficie para que evapore el agua. Por lo tanto, ya que su principal vehículo de agua, son tintas con baja toxicidad.

“En contra partida, estas tintas base agua requieren de mucha energía para secar porque se está aplicando calor. Además, el gran problema sobre materiales celulósicos, como el cartón, es que al secar se va a curvar”, explicó Josep

• UV: también existe esta familia de tintas que es la más convencional y se usa generalmente en máquinas para impresión de serigrafía digital. Esta tinta, por el contrario, no evapora nada al medio ambiente, ya que no se seca, sino que se cura. (La curación es una transformación energética de un monómero a polímero a través de luz violeta). Sin embargo, a pesa de que no necesita mucha energía para curar, si utiliza una gran cantidad de radiación para realizar la polimerización.
• UV LED: este tipo de tinta ha sido una de las más usadas en los últimos años en la industria por su flexibilidad, ofreciendo una buena respuesta a cortes, entre otros escenarios. Además, es una de las más sostenibles y certificada como la más eficiente, ya que no solo no evapora gases tóxicos, sino que además en su proceso de curado se utiliza una luz fría, lo que permite ahorrar energía en el proceso de polimerización.
• Agua UV: esta familia de tintas está compuesta por dos elementos: agua y UV, por lo que requiere los dos sistemas, secado y curado. “La gran dificultad que tiene esta tinta es la cantidad de energía que necesita para secarse porque necesita infrarrojos para evaporar el agua, por lo tanto, la cantidad de calor es alta y además se necesita de energía UV para polimerizar”, indicó Marín.

Por lo anterior, el tipo de tinta que más se perfila como mejor opción para lograr tanto calidad de impresión como un aporte al medio ambiente, es la UV LED. “En nuestro caso, que imprimimos para packaging, la adecuada es la UV LED. Hemos visto que para imprimir en cartón, una superficie que es celulosa, tiene mejor rendimiento”, siguió el experto.

Tradición vs. digital: tiempos de entrega más cortos

La impresión digital en corrugado ha transformado la industria al ofrecer una notable ventaja en términos de ahorro de tiempo. Para Josep, al analizar el proceso tradicional de impresión analógica, es amplia la complejidad y la cantidad de pasos involucrados. Desde la optimización del archivo, pasando por las múltiples etapas de pre-prensa como la disposición de las imágenes, la ubicación de las marcas, la realización de pruebas de color, hasta la creación y montaje de las planchas de impresión en la máquina, cada paso requiere tiempo y precisión.

En contraste, la impresión digital simplifica drásticamente este proceso. Una vez que el color está listo, se puede proceder directamente a la fabricación del cartón y su impresión. Esta eliminación de pasos intermedios no solo acelera la producción, sino que también reduce las posibilidades de errores, garantizando una mayor consistencia en la calidad.

Si bien después de imprimir el material aún hay que procesarlo, como troquelarlo, cortarlo y pegarlo, el tiempo ahorrado en la fase de preimpresión compensa ampliamente. Este ahorro de tiempo se traduce en entregas más rápidas al mercado, lo que permite a las empresas responder con agilidad a las demandas cambiantes de los clientes.

De hecho, al comparar tecnologías de impresión como Litho LAM, Pre Print, Flexo y Digital, surgen diferencias notables que destacan las ventajas de la impresión digital. Mientras que las técnicas tradicionales como Litho y Pre Print requieren procesos adicionales como la laminación y el uso de planchas de impresión, la impresión digital elimina estos pasos, simplificando el proceso.

Además, el tiempo necesario para cambiar de trabajo en la impresión digital es significativamente menor, centrado principalmente en el cambio de cartón; y a diferencia de otras tecnologías que requieren personal especializado, la digital es más directa y menos dependiente de la intervención humana.

En términos de respuesta, la impresión digital es inigualable, permitiendo tener el producto listo en tan solo un día, mientras que otros métodos pueden tardar días o incluso semanas. Esta eficiencia se extiende al uso de material, con la digital utilizando menos del 1% del material. Además, evita la sobreproducción, ajustándose exactamente a la demanda del cliente y reduciendo los residuos.

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Desventajas de la impresión digital: ¿es más costoso?

Aunque la impresión digital en el mundo del packaging promete soluciones rápidas y personalizadas, a menudo surge la pregunta sobre si es más costosa en comparación con los métodos tradicionales.

“A primera vista, puede parecer que la tinta digital es más cara, especialmente si se compara el costo de 1 kilo de tinta flexográfica con 1 kilo de tinta digital. Pero esta comparación directa puede ser engañosa”, aseguró Josep. 

El verdadero costo de la impresión no se encuentra solo en el precio de la tinta, sino en cómo se utiliza. Aunque la tinta digital puede tener un costo inicial más alto, su eficiencia en términos de consumo es notable.

Por ejemplo, las máquinas digitales modernas utilizan tinta UV LED, que tiene un alto peso molecular y un gran poder de coloración. Esto significa que se necesita menos tinta para lograr el color y la calidad deseados. De hecho, el consumo medio de tinta en 2022 para las máquinas digitales fue de solo 2,7 gramos por metro cuadrado, lo que indica un uso eficiente de la tinta.

Además, al comparar los costos por impresión, la digital puede resultar más económica. Mientras que una impresión convencional puede costar alrededor de medio dólar, una digital se sitúa en torno a los 0,3 dólares. Esta diferencia puede traducirse en ahorros significativos a largo plazo. 

“Sin embargo, es esencial no centrarse únicamente en los costos. La impresión digital ofrece ventajas que van más allá del precio, como la capacidad de personalización, la rapidez en la producción y la posibilidad de integrar características innovadoras, como la conectividad con smartphones”, concluyó el experto. Estas ventajas pueden agregar un valor significativo al producto final, algo que los consumidores aprecian y están dispuestos a pagar.