La empresa convertidora de América Latina en el ambiente global de negocios

En el escenario actual establecer directrices precisas para ser más competitivos es casi una adivinanza. Sin embargo, existen algunos temas estratégicos en los que, todos sabemos, es indispensable tener una estrategia definida.

Consumidores. Estos quieren empaques y productos de mayor conveniencia, como aquellos para productos listos para consumir, que se puedan utilizar en hornos microondas, con tapas de fácil apertura, o sin complejidades para abrirlos. Cabe resaltar aquí el incremento de la población mayor de 65 años; esto implica desarrollos que apunten a resolver requerimientos de uso particulares de este grupo de consumidores.

Productos de valor agregado. Para salirse de la venta por licitación, cada empresa deberá encontrar nichos de desarrollo de productos que les permitan ventajas y beneficios en la negociación con sus compradores. Esto es a todo nivel, no sólo de los convertidores con sus clientes, sino con sus proveedores de materias primas, equipos, tintas, adhesivos, etc. En este escenario los empaques inteligentes y activos tendrán un amplio desarrollo en el futuro cercano, al igual que las empresas que puedan ofrecer productos con especificaciones de barreras particulares, que presenten ventajas competitivas definidas.

Diseños novedosos. Hoy el diseño gráfico y estructural de un empaque son asuntos estratégicos, lo que implica un cambio radical en la forma de trabajo y desarrollo actual. Por un lado se debe entender la eficiencia en la cadena logística del elemento tridimensional y, por otra, la eficiencia en proceso de la parte impreso y de fabricación del elemento tridimensional. Antes se constaba la propuesta. Y hoy se debe evaluar el impacto en el tiempo de los desarrollos planteados, en términos de recursos, valor e impactos. Adicionalmente, es importante iniciar un trabajo de valorización del costo del diseño estructural. Hoy es común que este no tenga valor real para el cliente pero, dada la exigencia y nivel de experticia requeridas, seguramente será analizado este punto desde otra perspectiva en un futuro cercano.

En lo relacionado con la Responsabilidad Ambiental, está la oportunidad de conseguir beneficios económicos con una estrategia competitiva. Este es un aspecto con impactos nacionales e internacionales. Definitivamente las empresas que decidan hacer un trabajo serio y fundamentado en este campo tendrán ventajas frente a las que no lo hagan. Recordemos que la responsabilidad ambiental es un campo extenso de elementos que se deben cumplir, no sólo algunos aspectos seleccionados a discreción del convertidor. Como dicen en el medio, la sostenibilidad es un camino, no un fin.

Alianzas estratégicas. Aquellas empresas que no logren construir relaciones duraderas con sus clientes, pasarán mucho tiempo en negociaciones y definiciones alrededor del precio; y no en la generación de valor que surge al trabajar en equipos interdisciplinarios. Estas estrategias también ayudan a proyectar nuevos mercados y productos con mayor seguridad, dado que se trata de acompañamiento a los clientes en nuevas categorías de productos. Este punto también tiene que ver con el margen y, por ende, con la inversión e innovación. Este punto es, quizás, uno de los más importantes a ser considerados, dado que se está perdiendo este margen con el objeto de conseguir un negocio; y todos sabemos que las nuevas tecnologías requieren de presupuestos de inversión permanentes que puedan proyectar a las empresas convertidoras a la par con sus clientes.

Formación estratégica del talento humano de las empresas. Es indispensable capacitar técnicamente al equipo en diferentes campos del envase. En América Latina esta educación es escasa; y el acceso a temas específicos de conocimiento todavía es muy experimental. Este tema es quizás uno de los que requiere mayor atención. El cambio tecnológico en el mercado de empaques es muy dinámico, y este conocimiento muchas veces se maneja informalmente, cuando justamente se trata de uno de los activos más importantes de una organización. Se debe establecer la metodología para que siempre esté disponible y actualizado.

Mercados internacionales. Tratados de libre comercio que permitirán mayor tránsito de materiales de empaque de un país a otro, con beneficios arancelarios. Sin embargo, no sólo se trata de una oportunidad para el que exporta, sino para quienes importan.

Materias primas. Para algunos países este tema es muy complejo dado que los impuestos entre países no son equivalentes, lo que permite que algunos países tengan ventajas frente a otros y, en algunas ocasiones, frente a la competencia local. La ecuación hoy es retadora… y, si no se hace bien la tarea, se convierte en baja competitividad y pérdida de mercados.

Logística. No es posible planear una estrategia sin este elemento de una importancia crucial para toda la cadena de abastecimiento.