FMI proyecta crecimiento de 3,5% en 2019 para la economía internacional

En el marco de la reunión anual del Foro Económico Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI) dio a conocer la Actualización de Perspectivas de la Economí­a Mundial 2019-2020, en la que señala una leve baja para las economí­as en desarrollo, economí­as emergentes y mercados financieros.

En su análisis, el FMI proyecta un crecimiento económico mundial de 3,5 % en 2019 y 3,6 % en 2020, es decir, 0,2 y 0,1 puntos porcentuales por debajo de las estimaciones hechas en octubre de 2018; sin embargo, el organismo destacó que la expansión mundial está moderándose a un ritmo más rápido de lo previsto.

Según el FMI, las economí­as de mercados emergentes y en desarrollo disminuirán ligeramente a 4,5 % en 2019, con un repunte de 4,9 % en 2020. La proyección para 2019 se revisó a la baja (0,2 puntos porcentuales) con respecto a la de octubre, debido a una fuerte contracción proyectada en Turquí­a, en medio de un endurecimiento de las polí­ticas y una transición a condiciones de financiamiento externo más restrictivas.

Esta baja para las economí­as de mercados emergentes y en desarrollo está sustentada en la disminución en el flujo de capital, luego del aumento en las tasas de la polí­tica monetaria en Estados Unidos y las depreciaciones de los tipos de cambio, pese a que se dieron de manera moderada. "El comercio y la inversión han decaí­do, la producción industrial fuera de Estados Unidos se ha desacelerado, y la moderación de los í­ndices de gerentes de compras es una señal de que el í­mpetu está menguando", señala el Foro Económico Mundial en un comunicado compartido sobre este reporte.

En las economí­as emergentes, el aumento en la inflación se revirtió en cierta medida hacia finales de 2018. En México, se recortó significativamente el crecimiento para 2019 y 2020, como consecuencia de una menor inversión privada, para lo que el FMI aclara que "no se trata necesariamente del inicio de una desaceleración importante, pero hay que considerar los diversos riesgos que están en aumento".

Para las economí­as avanzadas el FMI prevé que el crecimiento se desacelere de 2,3 % en 2018 a 2 % en 2019 y 1,7 % en 2020. En Estados Unidos la expansión continúa, pero el pronóstico sigue apuntando a una desaceleración por el repliegue del estí­mulo fiscal.

La proyección para las economí­as en desarrollo que corresponde a Europa, en la zona que maneja el euro, presentarán rebajas en la economí­a; las revisiones importantes corresponden a Alemania, donde la zona que maneja el euro presentará rebajas en la economí­a. Las revisiones importantes corresponden a Alemania, donde la producción del sector automotor tendrá menor demanda externa, por lo que se reprimirá su crecimiento en 2019.

Para el FMI toda esta perspectiva económica proviene principalmente de una agudización de las tensiones comerciales y un deterioro de las condiciones financieras. "Durante la mayor parte de 2018 los mercados financieros en las economí­as avanzadas parecí­an haber permanecido inmunes a las tensiones comerciales, pero más recientemente se han producido interacciones entre ambos, que han provocado un endurecimiento de las condiciones financieras y una agudización de los riesgos para el crecimiento mundial", se lee en la nota de prensa divulgada por el Foro Económico Mundial.

La incertidumbre por el Brexit en Europa, el complejo panorama polí­tico y financiero en Italia y el cierre prolongado del gobierno federal en Estados Unidos significa riesgos a la baja. Un endurecimiento más severo de las condiciones financieras resulta particularmente costoso dados los elevados niveles de endeudamiento en los sectores privado y público de los paí­ses, advierte el FMI.

Inclusive asegura que en China el crecimiento podrí­a desacelerarse más rápido de lo previsto sobre todo si persisten las tensiones comerciales, lo cual podrí­a desembocar en ventas masivas y abruptas en los mercados financieros y de materias primas.

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El FMI presentó la proyección económica global, dando como resultado los porcentajes de expansión por bloques de economí­as desarrolladas y emergentes. Imagen: FMI.

La prioridad deben ser las polí­ticas económicas

Las conclusiones a las que llega el FMI están enfocadas a reorientar la polí­tica fiscal que garantice la sostenibilidad de la deuda pública, en el caso de las economí­as emergentes. La polí­tica monetaria en las economí­as avanzadas debe seguir normalizándose con prudencia.

El FMI es contundente con el llamado a los paí­ses: "la principal prioridad en materia de polí­ticas es que los paí­ses cooperen y resuelvan pronto sus desavenencias comerciales y la resultante incertidumbre en torno a las polí­ticas, en lugar de elevar más barreras perniciosas y desestabilizar una economí­a mundial que ya está desacelerándose".

Otra de las cartas que también aconseja jugar el FMI a las economí­as es la cooperación multilateral, para hacer frente a los riesgos crecientes.