Disminuya riesgos en su planta con un adecuado almacenaje de los químicos

Las empresas de conversión, grandes y pequeñas, se ven enfrentadas a la necesidad de almacenar en forma adecuada sus tintas, solventes y otras sustancias químicas. Son escasos los productos o desperdicios químicos que no representan un riesgo físico, como el de incendio o explosión, o que no son peligrosos para la salud de los trabajadores y la comunidad. Los convertidores pueden reducir los efectos nocivos de ciertos incidentes si toman en cuenta algunas de las reglas y normas que rigen el almacenamiento y manipulación de materiales peligrosos.

El almacenamiento seguro de las sustancias químicas es uno de los principales intereses de las normas de seguridad y medioambientales concernientes a la acumulación de desperdicios y al almacenamiento de líquidos peligrosos, bien sea en tanques subterráneos o en la superficie. Las agencias y compañías de seguros, cuyos intereses tienen que ver con la forma como el convertidor guarda sus sustancias químicas, por lo general están al tanto de cuánto se puede almacenar y en qué condiciones.

Riesgos de inflamabilidad y explosión
El almacenamiento correcto de líquidos inflamables en los talleres es de cumplimiento obligatorio. Es preciso que los consumidores de cantidades grandes o pequeñas de tintas, solventes y líquidos para el lavado de prensas, entre otros, tomen las precauciones necesarias. Aunque las correspondientes salvaguardas pueden variar de un caso a otro, según las cantidades almacenadas en un momento dado, los conceptos generales son fundamentales. La primera prioridad es la prevención; la segunda, el confinamiento.

Un problema que se suele presentar con frecuencia en el traslado de líquidos inflamables de un recipiente a otro es la posibilidad de electricidad estática. Una simple chispa puede desencadenar una explosión o un incendio. De igual forma, la pérdida de vidas humanas y los daños físicos en la planta pueden adquirir grandes proporciones. Una compañía de tintas en el estado norteamericano de Massachusetts aprendió esta lección cuando los empleados vertieron tolueno de un tanque a una caneca sin tener instalada una apropiada conexión a tierra. La incidencia de electricidad estática en las actividades de impresión exige que se impongan disposiciones referentes a la conexión de polo a tierra, mediante el uso de pinzas cocodrilo en los tanques que contengan solventes, así como en los equipos que se utilizan para surtirlos. Los equipos eléctricos ubicados en un radio de siete metros alrededor del punto de uso o de almacenamiento de productos químicos deben ser a prueba de explosiones, a fin de eliminar el riesgo de la generación de chispas.

Un alto grado de vapores de solventes en el aire puede generar un ambiente propicio para desencadenar un incendio o una explosión. Para disminuir a un mínimo el aumento del riesgo, el almacén debe estar provisto de ductos de ventilación adecuados para evacuar los vapores. De acuerdo con el tamaño de la estancia se requiere cierta cantidad de circulación de aire, con el fin de impedir la acumulación de vapores que puedan explotar si se presenta ignición o calor.

Se deben establecer las salvaguardas necesarias con respecto a extintores, sistemas de aspersión y control de vertidos, entre otros. Los aspersores y extintores se deben colgar a la altura del brazo, con su debida señalización y determinando su localización desde lejos. No se les debe colocar nada al frente que obstaculice el acceso inmediato a ellos. También deben recibir inspecciones y mantenimiento rutinarios según un cronograma programado.

Es posible que las normas sobre la calidad del aire en recintos cubiertos exijan también que el personal que desempeña sus labores en un lugar de almacenamiento de solventes y tintas, utilice caretas respiratorias debidamente ajustadas, además de someterse a exámenes médicos y recibir capacitación.

Dependiendo de los equipos y de la distribución de la planta física, se debe evaluar cualquier exposición a un riesgo de seguridad o de salud, con el fin de aplicar lo que dicten las normas correspondientes y cerciorarse de que se esté cumpliendo con todas las exigencias de ley.

Almacenamiento de sustancias químicas tóxicas y reactivas
No todas las normas sobre almacenamiento tienen que ver con los riesgos de incendio o explosión. Algunas versan sobre la calidad del aire y otras sobre la necesidad de aislar, segregar (o ambas), algunas sustancias químicas para prevenir reacciones fatales entre éstas y los trabajadores.

Los tanques de gas presurizados que contengan oxígeno, hidrógeno, propano, acetileno, etc., se deben guardar en áreas seguras, en las que se puedan aislar para evitar que se caigan, y contar con por lo menos 3 metros de separación entre cada uno, con el fin de evitar que los vapores se mezclen y causen reacciones químicas. Hay tanques de gases que, sin ser necesariamente inflamables o explosivos, pueden tender a absorber el oxígeno del área y producir asfixia a quienes que se encuentren próximos a ellos. La señalización debe ser muy evidente y advertir de los riesgos al personal presente en el área de riesgo.

Todos los materiales tóxicos deben ser debidamente etiquetados y almacenados en una plataforma hermética o en un recinto que se haya sellado en forma adecuada. La seguridad de los trabajadores y del público en general corre el riesgo de que cualquier sustancia química tóxica pueda permear el cemento o el piso de concreto, derramarse en un desagüe o incluso llegar al sistema de agua potable.

El área de almacenamiento debe quedar separada e ir debidamente marcada con señales de precaución. Igualmente las tuberías que se utilicen para transportar los químicos de un tanque a otro deben llevar la identificación correspondiente con las etiquetas o cintas de color apropiadas.

Departamentos de bomberos y normas de la NFPA en Estados Unidos
A continuación se incluyen, a manera de ejemplo, algunas normas establecidas por la Asociación Nacional de Protección contra Incendio, de Estados Unidos, (NFPA, por su sigla en inglés). Si bien estas reglas han sido escritas para ser cumplidas en plantas establecidas en territorio estadounidense, a los impresores y convertidores latinoamericanos les resultará de utilidad conocerlas, por cuanto los factores de seguridad industrial suelen ser los mismos en cualquier planta.

La institución que interviene de manera más inmediata y frecuente en relación con las empresas de artes gráficas y conversión es el departamento de bomberos local. En las visitas periódicas de los inspectores o jefes de bomberos se vigilan los aspectos relacionados con la naturaleza y cantidad de sustancias químicas inflamables y explosivas, así como las precauciones de seguridad que se tomen en relación con su almacenamiento. Los permisos expedidos por los departamentos de bomberos suelen incluir limitaciones con respecto a la cantidad de sustancias químicas inflamables que se pueden almacenar, y también hacen referencia a las respectivas disposiciones de prevención y confinamiento.

Bodegas de almacenamiento:Los pormenores sobre la construcción de instalaciones para el almacenamiento de materiales inflamables están perfectamente definidas en los estándares de la NFPA que emplean los departamentos de bomberos. Entre las normas más destacables de la NFPA para las bodegas de almacenamiento de líquidos en recintos cerrados se encuentran las siguientes:

• "4.4.2.1 Todas las áreas de almacenamiento se deben construir de forma que cumplan con las especificaciones pirorresistentes."


• "4.4.2.2 Las aberturas de los muros interiores de recintos o edificaciones adyacentes, al igual que las aberturas de los muros exteriores con especificaciones pirorresistentes se dotarán con puertas contra incendios, normalmente cerradas y clasificadas, que cumplan con las especificaciones pirorresistentes correspondientes a los muros en cuestión … Se permite instalar dichas puertas, de manera que se abran durante las operaciones de manipulación de materiales, si las mismas están diseñadas para cerrarse automáticamente en caso de emergencia de incendio según las disposiciones de los dispositivos de cerramiento clasificados.


• "4.4.2.4 El diseño de la construcción de muros exteriores debe proporcionar una fácil accesibilidad a las operaciones de extinción de incendios mediante aberturas de acceso y ventanas o paredes de paneles livianos no combustibles."


• "4.4.2.5 Cuando se surtan líquidos de las clases 1A ó 1B o líquidos inestables, o cuando se almacenen líquidos de la clase 1A o líquidos inestables en recipientes de más de 1 al. (4L), el muro exterior o construcción cubierta debe incluir rejillas de ventilación para combustión."


• "4.4.2.6 A partir del 1º de enero de 1997, y siempre que así se requiera, …se instalarán confinamientos a los desagües en todas las nuevas construcciones."


• "4.4.2.7 Cuando se exija un confinamiento o desagüe …. se dispondrá de los medios necesarios para evitar la circulación de líquidos quemantes en condiciones de emergencia hacia el interior de áreas edificadas, propiedades o recursos naturales críticos adyacentes."


• "4.4.2.8 Cuando se exijan aspersores automáticos … se dispondrá de los medios necesarios para evitar que los líquidos quemantes pongan en riesgo a otras pilas o bastidores de almacenamiento, así como a otras áreas edificadas, propiedades o recursos naturales adyacentes importantes."

"Excepción No. 2: Este requisito no se aplicará a aquellas áreas que cuenten con protección contra incendios mediante sistemas extintores que no utilicen agua, tales como el CO2 de anegamiento total, la espuma de gran expansión o la espuma filmógena acuosa (AFFF, por su sigla en inglés)."

• "4.4.2.9 Los equipos eléctricos y el cableado interno de los recintos para el almacenamiento de líquidos de la clase I serán los apropiados para los lugares clasificados como de clase I, división 2. Los equipos eléctricos y el cableado interno de los recintos para el almacenamiento de líquidos de las clases II y III únicamente serán para uso general. Todos los equipos eléctricos y el cableado deben ser a prueba de explosión en un radio de siete metros alrededor de la fuente de ignición."

En los alrededores de todas las áreas de utilización de los tambores se debe disponer de cables con pinzas cocodrilo para los acoples a la tubería de polo a tierra. La puesta a tierra debe ser en una tubería de agua fría. No se puede conectar ni a las tuberías de agua caliente ni a la de los aspersores. Todos los tambores abiertos o surtidores, así como cualquier otro recipiente de solventes inflamables deben estar conectados a tierra en todo momento. 

• "4.4.2.11 Las áreas de almacenamiento de líquidos en las que realicen actividades de surtido de éstos estarán provistas de un sistema bien sea de ventilación de salida por gravedad o mecánico continuo. Si se surten líquidos de la clase I dentro del recinto se deberá utilizar ventilación mecánica."

Armarios de almacenamiento
La mayoría de las empresas de conversión en algún momento tienen cantidades, así sean muy pequeñas, de sustancias químicas peligrosas. Para este efecto no son muy prácticos los almacenes. La solución más viable para los pequeños impresores y convertidores son los armarios de almacenamiento. A los armarios protegidos contra el fuego se les trata como almacenes en miniatura. Estos cumplen muy buen servicio alojando cantidades pequeñas de sustancias químicas inflamables, bien sea en tambores, en canecas pequeñas o en algún otro tipo de recipiente. El armario desempeña la función de confinamiento para efectos tanto de vertidos como de incendios. Consideradas en forma global, las normas que rigen para los almacenes se aplican también a los armarios. En este caso, por consiguiente, es igualmente importante tener en cuenta las conexiones a tierra y la proximidad de los armarios a los equipos eléctricos.

Las leyes locales limitan el volumen de almacenamiento
Las autoridades locales de las zonas donde se encuentren las plantas pueden reglamentar las condiciones en las que se deben almacenar y utilizar los materiales peligrosos. Los códigos y estándares de construcción ofrecen una solución para confinar o restringir el volumen de sustancias químicas y sus condiciones de almacenamiento. Los códigos sanitarios, ministerios o secretarías de salud intervienen en regiones sensibles a la exposición ecológica. A los departamentos de bomberos les corresponde hacer cumplir las disposiciones de seguridad correspondientes. La mayoría de las autoridades locales restringen la cantidad de productos químicos almacenados en las instalaciones, relacionándolos por lo general con el número de galones de sustancias químicas sin reaccionar y de los desperdicios peligrosos.

Tanques de almacenamiento subterráneos y en la superficie
La amenaza de fugas y vertidos de sustancias químicas ha constituido una seria preocupación para los organismos públicos y ambientales. Las condiciones peligrosas que rodean a los hogares y fuentes de agua potable expuestos a fugas de estaciones de gasolina e instalaciones industriales, que son ampliamente divulgados, han causado un alto grado de inquietud con respecto a la estabilidad de los tanques envejecidos y a las disposiciones de confinamiento en el caso de fugas o vertidos. Esta preocupación se ha traducido en la normatividad que han promulgado los organismos federales y estatales estadounidenses, concerniente tanto a los tanques subterráneos como a los ubicados en la superficie. Las autoridades locales también han aprobado leyes que establecen restricciones a la instalación y uso de los tanques de almacenamiento.

Las normas especifican los materiales que son aceptables para la fabricación según la naturaleza de la sustancia química, el confinamiento exigido en caso de una ruptura del tanque, los instrumentos de control, si se requieren, los procedimientos de prueba y las exenciones en relación con las normas. Las plantas deben registrar u obtener permiso de las autoridades locales u organismos estatales para los tanques y mantener registros sobre el mantenimiento y desempeño de éstos.

Tanques subterráneos de almacenamiento:La Norma Federal Estadounidense 40CFR, numeral 280, establece para los tanques subterráneos de almacenamiento (UST, por su sigla en inglés) que "los estándares técnicos y requerimientos de medidas correctivas para propietarios y operarios de tanques subterráneos de almacenamiento, especifican que ninguna persona puede instalar un sistema de UST …para almacenar sustancias reguladas a menos que el sistema: …1. evite fugas debidas a la corrosión o falla estructural durante la vida útil del sistema UST; 2. se encuentre dotado de protección catódica contra la corrosión y esté construido en material no corrosivo …o se encuentre diseñado de forma que prevenga la fuga o retenga la liberación de cualquier sustancia almacenada, y 3. esté construido o revestido con un material que sea compatible con la sustancia almacenada."

Tanques de almacenamiento en la superficie
Las condiciones de fabricación e instalación de los tanques instalados en la superficie son muy semejantes a las de los subterráneos. La principal diferencia radica en la necesidad de construir un área de confinamiento que retenga una determinada cantidad de ´fugas´ de líquidos. Por lo general se exige que el confinamiento esté en capacidad de retener el 110% de los líquidos almacenados en el tanque o tanques.

Programas de prevención de vertidos
Uno de los requisitos primordiales, siempre y cuando se cumplan los estándares de construcción, es la elaboración de un plan de prevención y respuesta de las instalaciones a los vertidos. Un plan crítico incluye:

1. Información general, estado de inscripción o permiso y certificación de manejo de los tanques.
2. Mapa de las instalaciones físicas que indique la ubicación de tanques y tuberías.
3. Resumen de los incidentes de fugas de los cinco años anteriores.
4. Identificación y evaluación de las causas del vertido (si ocurrió).
5. Condiciones actuales de conformidad con las normas.
6. Procedimiento de registro de inspecciones.
7. Plan de respuesta a los vertidos.
8. Evaluación del sitio y hallazgos correspondientes.
9. Formulario de informe de vertidos.

Limpieza y mantenimiento
El factor más crítico en el almacenamiento de productos químicos es la necesidad de hacer que se cumplan las normas de seguridad. Incluso si se tienen instalaciones que cumplan con todas las normas, una limpieza deficiente o un descuido en la aplicación de las prácticas de seguridad puede echar a perder las precauciones que se hayan tomado para proporcionar barreras a accidentes e incidentes. Cualquier distribución de almacenamiento de químicos peligrosos debe ir acompañada de una inspección periódica de rutina. Esta debe ser una inspección documentada con las disposiciones referentes a las medidas remediales necesarias para corregir cualquier infracción observada. La capacitación del personal es crucial para manejar adecuadamente las sustancias químicas y dar los pasos necesarios en caso de accidente.

El manejo de la producción y el control de los inventarios son vitales para garantizar que los saldos de las sustancias químicas que se hayan utilizado no se acumulen en los almacenes y que las adquisiciones se realicen dentro de los límites establecidos conforme con cantidades aceptables para una determinada área. El orden y la limpieza son elementos indispensables. Con el mantenimiento se debe garantizar que todo se encuentre su sitio, que los pasillos no estén obstaculizados y que las áreas se mantengan libres de suciedad y desechos. El personal que utilice sustancias químicas debe observar las normas de seguridad y evitar derramamientos de líquidos y basuras en el almacén o área de bodega. Las áreas circundantes de los tambores y tanques deben mantenerse accesibles y libres de estibas o de otros tambores.

El almacenamiento llevado en condiciones apropiadas no tiene que ver únicamente con la construcción del edificio. Es la suma de todas las características físicas del almacén así como de la forma como éste se utiliza, sin ser objeto de maltrato por parte de las personas que trabajan en las instalaciones en que está ubicado.