En el actual ambiente de marketing y competencias, muchos se refieren al concepto de la experiencia del consumidor, y a cómo los productos pueden llegar a generar algunas verdaderamente memorables. Pues bien, cada día más corroboramos cómo en esta fórmula ganadora —para generar experiencias únicas, innovadoras e inspiradoras, y que estimulen esa conexión emocional y sensorial significativa con el consumidor— existe una herramienta que ninguna otra parece superar… su majestad, el empaque.
El empaque constituye uno de los elementos centrales del marketing hoy para la creación de experiencias perdurables entre consumidor y producto. Es por ello que la ciencia del diseño de envases, no solamente gráfico, sino estructural, debe ocupar hoy más que nunca un lugar esencial en la agenda de los profesionales en este campo.
Precisamente porque para lograr diferenciar un producto, en medio de una jungla de otros miles en las estanterías, el diseño estructural es un poderoso aliado natural. Así lo refleja muy bien el británico Stergios Bititsios en el artículo “Diseño estructural, vehículo para la innovación”. En exclusiva para El empaque + Conversión, uno de los más reconocidos expertos en diseño de envases en Europa, destaca el rol esencial que el diseño estructural está cobrando para el posicionamiento de marca, y para que el ADN de nuestro producto pueda sintonizarse armónicamente con los consumidores, y pueda lograr desencadenar no solamente impacto, sino diferenciación.
Está muy claro cómo no solamente los gráficos, colores y textos resultan fundamentales a la hora de cautivar y fidelizar a un consumidor y de personificar a una marca, sino que la forma y la funcionalidad que abarca el diseño estructural de un envase resultan claves, en lo que Bititsios llama superioridad perceptual. “El sistema cognitivo humano tiene la capacidad de percibir e interpretar el propósito del objeto físico tridimensional en cuestión de fracciones de segundo, mientras que necesita tiempo para registrar y procesar un texto”, dice Bititsios para enfatizar cómo resulta muy importante capitalizar en el diseño estructural del envase para atrapar al consumidor en los escasos 8,5 segundos que tarda, en promedio, en tomar una decisión de compra.
Afortunadamente para los profesionales del envase hoy no son pocos los recursos tecnológicos con los que cuenta para poner a funcionar a su favor las bondades de un diseño bien concebido.
Suites exclusivamente dirigidas al diseño estructural de envases, que permiten visualización 3D de los modelos envase/producto, revolucionarios y versátiles sistemas de troquelado, así como diversidad de materiales, entre muchos otros, representan herramientas que le permiten estar a la vanguardia en este campo, y poner a volar su imaginación… para innovar o mejorar sustancialmente los diseños actuales de sus envases logrando así, realmente, enamorar al consumidor, desde cualquier ángulo del anaquel.