El documento establece que para el 2030, Colombia logrará prevenir los impactos negativos a causa de los residuos plásticos y microplásticos en los ecosistemas.
Además, también se realizará la ejecución del programa de Comunicción y cultura ciudadana, un plan de compras públicas sostenibles, artículación con el servicio público de aseo, una buena gestión de la información, incentivos para el uso materias primas innovadoras que incorporen criterios ambientales, gestión de recursos nacionales, de cooperación y crédito y, por último, seguimiento y evaluación de los resultados del Plan.
La ejecución del proyecto busca que para el 2023 se prohibirá la distribución y comercialización de diferentes productos problemáticos o innecesarios. Para el 2025, por lo menos un 25% (en peso) de los recipientes utilizados para empacar o envasar comidas y alimentos preparados en el sitio, son efectivamente aprovechados.
El último objetivo indica que para el año 2030, el 100% de los plásticos de un solo uso puestos en el mercado, son reutilizables o reciclables o compostables. Además, los productos plásticos desechables que técnimente lo permitan, cuenten con un contenido promedio mínimo del 30% de material reciclado. Y, por lo menos el 50% (en toneladas) de recipientes utilizados para empacar o envasar comidas y alimentos preparados en el sitio, sean efectivamente aprovechados.