Preprensa para impresión flexo en 10 estaciones

**B2BIMGEMB**1** El antiguo proverbio chino "Ojalá vivas en tiempos interesantes" va muy bien con el mundo de las etiquetas autoadhesivas, no solamente está viviendo tiempos "interesantes", sino que están enfocadas en China y sus vecinos del Lejano Oriente. Los cómodos acuerdos del "viejo" mundo occidental están siendo conmocionados por el surgimiento del Lejano Oriente como un centro neurálgico industrial y la pregunta importante que enfrentan los impresores de etiquetas en Occidente hoy es: ¿Nos unimos a ellos, o los ignoramos a nuestro propio riesgo?

Las tendencias manufactureras en otras industrias están imponiendo el pensamiento, y el ritmo en la industria de etiquetas. A medida que más de nuestros clientes trasladan su producción a unidades llamadas "Economías pujantes" (conocidas como "Tigres"), necesitan proveedores locales para fábricas locales casi de la misma manera como se impuso el patrón en Occidente. Los impresores de etiquetas ahora tienen que pensar en establecer recursos de impresión en estos nuevos umbrales.

Las etiquetas autoadhesivas se han establecido a si mismas como un producto "De todo para todos", así sea para el más diminuto identificador en un chip microscópico, o para el folleto de instrucciones multi-página en un contenedor de pintura de 5 litros. Esa adaptabilidad de la etiqueta de desempeñarse en casi cualquier producto, por ejemplo, ha impulsado el crecimiento anual en Europa Occidental en 72 por ciento en la última década.

El crecimiento en Estados Unidos ha sido similar, pero las lecciones aprendidas en Europa están pavimentando la vía para obtener una entrada exitosa en las llamadas "Economías pujantes" ("Tigres"). Europa, y particularmente un conjunto de 25 países en la Unión Europea, con casi el mismo número de idiomas, han servido como terreno de prueba a medida que la tendencia hacia la globalización ha crecido en productos de consumo. Las compañías de Productos de Consumo, CPC (por su sigla en inglés), están constantemente pidiendo que su identidad de marca sea coherente e integrada a través de todas las fronteras. Con cada país requiriendo su propio idioma local, y se han dado el lujo de obtenerlo con las etiquetas autoadhesivas y su flexibilidad, esto ha demostrado por si solo tener un significado eficiente para lograr uniformidad de marca.

Hablemos claro
Con corridas relativamente cortas de un diseño común de etiqueta, en diferentes idiomas, producida justo a tiempo, en una planta cerca del cliente, ha demostrado que un impresor de etiquetas puede ofrecer un sistema económico de entregas. Le evita al cliente tener que mantener mucha cantidad de producto en stock para cada mercado nacional. Tal sistema puede ser suficientemente flexible para poder hacer frente a una subida súbita en la demanda de etiquetas para un país en particular.

En Estados Unidos, la necesidad de un servicio multi-idiomas no es tan importante. Sin embargo, en el Lejano Oriente, donde los artículos ahora se están produciendo para casi todos los países del mundo, con la consecuente necesidad de atender prácticamente todos los idiomas del mundo, sí es muy importante. Aquí la experiencia de los europeos occidentales ha sido que los impresores de etiquetas agresivos y con sentido ‘aventurero’ están muy bien parados.

Obviamente, muchos impresores europeos tuvieron una ventaja. El renacer de Rusia y de la Comunidad de Estados Independientes (CIS) a finales del decenio de los ochenta y de los noventa abrió la oportunidad para explorar la transformación de economías controladas por el Estado a mercados de consumo. Este desarrollo impulsó una rápida demanda pública que generó se llenaran las estanterías con productos muy atractivos desde el punto de vista visual.

Economías como la de Rusia fueron lentas para acogerse al gran énfasis del mundo Occidental en productos de consumo, decorados de manera atractiva, puestos en exhibición y que prácticamente dijeran "cómprame". Pero a medida que las grandes cadenas de supermercados entraron y los empresarios locales se unieron a la competencia, las tradiciones campesinas pasadas de moda, de vender alimentos cosechados en casa, y venderlos en cualquier envase viejo a la orilla del camino, desapareció.

Ahora, esas naciones Europeas Orientales se han unido a la multitud con todas las reconocidas cadenas minoristas. Sus almacenes al detal ofrecen una visión parecida a la de los centros comerciales de Estados Unidos y Europa, y contienen una panoplia de etiquetas autoadhesivas con las que estamos familiarizados.

A medida que las compañías locales de comida y bienes de consumo durables se esforzaron para igualar el impacto de sus rivales globales, creció su demanda por etiquetas parecidas. Con todo esto vino la oportunidad de establecer que impresores de etiquetas en la Europea Occidental abrieran subsidiarias o a formaran joint ventures.

El resultado final ha sido que la impresión de etiquetas de las naciones Europeas Orientales ha cumplido su mayoría de edad y naciones como Polonia y la República Checa pueden proveer un servicio de impresión de etiquetas tan sofisticado como la mayoría en Occidente. El Congreso FINAT, realizado en Varsovia, en reconocimiento a estos grandes avances, presentó relato tras relato de éxitos.

Ir hacia adelante también significa ir hacia arriba. La llegada nunca cesante de nuevas tecnologías y técnicas ha requerido que los impresores existentes estén atentos a lo nuevo. La estrategia requiere que actualicen sus plantas productoras y eviten que nuevos rivales se acerquen sigilosamente desde afuera.

Scott Pillsbury, director del Instituto de Fabricantes de Etiquetas y Marbetes (Tag and Label Manufacturers Institute, TLMI) de Estados Unidos, reconoció este desarrollo. Pillsbury afirmó que el Congreso FINAT en Varsovia podría guiar hacia un cambio fundamental en la forma en que se está administrando hoy el negocio de impresión de etiquetas.

"Nuestro mercado es robusto y está creciendo, y existen oportunidades para grandes y pequeños jugadores especializados. El alto costo de obtener mejor tecnología es una barrera de entrada para mantenerse competitivo," agregó Pillsbury. "Todavía hay grandes oportunidades de negocio allá afuera para compañías emprendedoras que quieran proveer un servicio completo a sus clientes. Dados los precios de la tecnología estas compañías no pueden hacerlo todo solas. Tendrán que formar alianzas con cada socio en el equipo proveyendo una parte especializada del servicio". Y esto es un punto neurálgico para el futuro y el avance en el Lejano Oriente.

No existe barrera ahora que la tecnología no pueda atravesar. Si puede ser comprado en Cincinnati, puede ser comprado también en Shanghai, en serio, las habilidades de impresión siguen en pie por algo pero hoy los impresores del Lejano Oriente pueden estar tan capacitados como su competencia en Occidente. Los bajos costos laborales les dan una ventaja definitiva, mientras puedan entrar en estos mercados emsergentes.

Próximos pasos
En Octubre pasado la FINAT y el TMLI celebraron una reunión junto con seis impresores de etiquetas de ambos lados del Atlántico, y de todo tipo de tamaños de compañías, en la que compartieron sus puntos de vista y experiencias con la globalización. Esto no se ha perdido para los miembros de la FINAT. También tuvo lugar un movimiento para establecer relaciones fiables con impresores en la India, que fue realizado a través de la formación de un Intercambio de Etiqueteros Europeos-Indios (Diciembre 5-7), para actuar como "facilitador de relaciones" entre la industria etiquetera Europea y la de India. El objetivo es crear un foro para darles a los miembros de compañías pequeñas y medianas en ambas regiones mejores oportunidades de hacer negocios entre sí. El foro fue patrocinado por el programa de Inversión de Asia (Asia Invest Program) de la Unión Europea y fue organizado en cooperación con las asociaciones nacionales de comercio VskE (Alemania) y LMAI (India).

El movimiento culminó con reuniones persona-a-persona entre las compañías en Nueva Delhi, en Diciembre, pero comenzará en agosto próximo cuando los miembros de la Asociación de Fabricantes de Etiquetas de la India (LMAI, por su sigla en inglés) se reúnan en Mumbai para conocer los aspectos prácticos al hacer negocios con compañías europeas.

Más de 80 impresores de etiquetas y convertidores pequeños y medianos de ambas regiones comerciales participaron en el centro del Intercambio Etiquetero Euro-India. El propósito es sentar las bases para una cooperación de negocio exitosa entre las PYMEs de la India y las Europeas en la Industria Etiquetera. Esto incluye: Desarrollo de relaciones de comercio y suministro; inversiones en el sector etiquetero, para India y Unión Europea; establecimiento de empresas conjuntas; y la transferencia de conocimiento del mercado y de la tecnología.

El éxito fortalecerá el sector en India y la Unión Europea. La conferencia en Mumbai explicará los objetivos del Intercambio Etiquetero a los miembros de la LMAI, les hará una introducción al mercado Europeo y les dará información general acerca del programa de Inversión de Asia. Esta reunión identificará compañías que deseen desarrollar relaciones de asociación de comercio y permitirá encontrar perfiles para desarrollarse y facilitar el "Padrinazgo"… y comprobar el proverbio que afirma cómo estamos "viviendo tiempos interesantes."